Circulan por la red desde hace semanas denuncias de compra de votos por parte del PRI (Partido Revolucionario Institucional), cuyo candidato era Enrique Peña Nieto. Bolsas con propaganda electoral, alimentos, gorritas, juguetes para los niños y billetes de 100 y 200 pesos...Es el temor que arrastraban todos los simpatizantes de AMLO. Los diarios afines al poder, así como los medios en general (con Televisa al frente) han ido sesgando las encuestas durante toda la campaña electoral, y el candidato Peña Nieto, diseñado en las cocinas del PRI para dar una imagen entre winner, hombre seguro, fiel, familiar y honrado, ha sido acompañado por alfombras de seda hasta las elecciones del pasado domingo. En los momentos en que los medios y el aparato no ha podido controlar la situación (léase la Feria del Libro de Guadalajara o el suceso que derivó en el movimiento #yosoy132) se ha podido observar el bajísimo nivel del que aspira a ser Presidente de México por 6 años.
Y Peña Nieto se ha proclamado, según él, según Josefina Vazquez Mota (candidata del PAN) y según todos los medios de comunicación, ganador en las Elecciones a la Presidencia de México. Y todos los presidentes se han avalanzado a felicitar al ganador...
Peña Nieto declara que no tiene nada que ver con el PRI "del pasado", pero su PRI se ha dedicado, igual que aquél, a controlar los medios, a acaparar la información, a ningunear al adversario y a comprar votos.
AMLO (Andrés Manuel López Obrador, candidato por el PRD), que perdió sospechosamente hace 6 años y por 0,5% las elecciones frente a un Felipe Calderón (FeCal en los medios...) que también se apresuró a declararse ganador, ha declarado que va a solicitar el recuento de todos los votos, ya que sospecha que ha habido fraude (de nuevo). Esta reclamación se hace al IFE (Instituto Federal Electoral). En su página web aún hoy es imposible entender cuáles han sido los resultados finales.
Esta vez la diferencia no ha sido de medio punto sino de 6 puntos, parece ser que el PRI domina la técnica mejor que el PAN (son más de 70 años de perfeccionamiento). Pero AMLO denuncia que se han detectado irregularidades en el cómputo del 80% de las mesas electorales.
No van a hacer ningún recuento. O harán algún circo aderezado de buenas frases donde se utilizará "democracia", "limpieza", "legitimidad" y otras palabras que hoy carecen de sentido alguno.
No importan las fotos que corren en las redes sociales (subidas por votantes) y que muestran a los gorilas del PRI amedrentando y dando palizas, irreguralidades en el recuento, o el desbarajuste en la web del IFE, los "errores" en el traslado de datos desde las mesas al sistema informático. Incluso hay alguna información (sin confirmar) que relaciona a Anonymous, y una entrada de éstos en la web del IFE con captura de pantalla incluida que daría ganador a AMLO...Eso no merece ninguna investigación.
Al otro lado del charco, desde la distancia geográfica y probablemente desde la cercanía empresarial, nuestros medios hablan de que AMLO pone en jaque las elecciones mexicanas, y lo acusarán de crear el caos como hicieron en 2006 después del fraude del triunfo de FeCal (Felipe Calderón) con su movilización en el zócalo del DF.
Y desde el mismo lado del charco, yo vuelvo a pensar en mis amigos de México, siempre críticos, siempre dolidos con su país y sus conciudadanos, siempre beligerantes, lúcidos, cultos, inquietos.
Y pienso que los 60.000 muertos reconocidos por el gobierno en la lucha contra el narco en estos últimos seis años, o las mujeres asesinadas en Ciudad Juárez, no merecen tanta suciedad, tanta desfachatez y tanta impunidad durante tantos y tantos años...
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